Hace un tiempo me enfrenté al típico problema: mi lavadora empezó a oler raro. Ese aroma a humedad se colaba incluso en la ropa recién lavada, y eso sí que no lo podía permitir.
Después de probar varios trucos y métodos, conseguí solucionar el problema, y hoy quiero compartir contigo lo que a mí me funcionó. Sin tecnicismos, en confianza, como si se lo contara a un amigo. ¡Vamos allá!
¿Por qué puede oler mal una lavadora?
Primero, déjame contarte algo importante: la lavadora, aunque limpia nuestra ropa, también acumula residuos. Puede ser por restos de detergente, humedad atrapada, o incluso suciedad en los filtros.
Si no le damos un poco de cariño de vez en cuando, es normal que empiece a generar ese olor desagradable. Ahora que sabemos por qué pasa, vamos a solucionarlo.
Mis trucos caseros para quitar el olor a humedad
1. Limpieza a fondo con vinagre y bicarbonato
Cuando mi lavadora empezó a oler mal, lo primero que hice fue limpiarla por dentro.
Esto es lo que hice:
- Vacía la lavadora completamente.
- Echa una taza de vinagre blanco directamente en el tambor.
- Añade dos cucharadas de bicarbonato en la misma zona.
- Pon un ciclo largo con agua caliente. Déjala trabajar y, al acabar, abre la puerta para que se seque bien.
Este truco no solo quita el olor, sino que deja el tambor impecable. A mí me funciona cada vez que quiero darle una limpieza rápida.
2. Revisar la goma del tambor
Una de las cosas que más me sorprendió fue la cantidad de suciedad que se acumula en la goma de la puerta. Seguro que sabes de lo que hablo: ese borde flexible que rodea el tambor.
Para limpiarlo:
- Usa un trapo húmedo con vinagre o jabón.
- Repasa los pliegues (te aviso, puede haber cosas inesperadas ahí, desde pelusas hasta moho).
- Si hay manchas negras de humedad, frota suavemente con un cepillo de dientes viejo y bicarbonato.
Este paso fue clave para eliminar el olor en mi caso, porque muchas veces el problema está justo ahí.
3. El cajetín del detergente, el gran olvidado
Confieso que yo no prestaba mucha atención al cajetín hasta que vi que estaba lleno de restos secos de detergente y suavizante. Ahora lo limpio regularmente así:
- Saco el cajetín (si no sabes cómo, mira el manual de tu lavadora).
- Lo lavo bajo el grifo con agua caliente y un poco de jabón.
- Uso un cepillo pequeño para los rincones más difíciles.
- Lo seco bien antes de volver a colocarlo.
Desde que lo hago, he notado que los ciclos de lavado son más eficientes y, por supuesto, el mal olor ha desaparecido.
4. El filtro: el escondite de los olores
Esto es algo que descubrí tarde, pero es esencial. El filtro de desagüe suele acumular pelusas, restos de ropa y hasta pequeñas sorpresas como monedas o botones. Te recomiendo que sigas estos pasos:
- Localiza el filtro (normalmente está en la parte baja de la lavadora).
- Coloca un recipiente o una toalla para recoger el agua que pueda salir al abrirlo.
- Sácalo y limpia los restos con cuidado.
- Lávalo bajo el grifo y vuelve a colocarlo bien ajustado.
Si nunca has limpiado el filtro, te recomiendo hacerlo ya mismo. Notarás la diferencia.
5. Un truco extra: seca la lavadora después de usarla
Esto es más preventivo que otra cosa, pero desde que lo hago, no he vuelto a tener problemas de olor. Después de cada lavado:
- Dejo la puerta y el cajetín abiertos un rato para que se ventilen.
- Paso un trapo seco por el tambor y la goma para eliminar la humedad que queda.
Parece un pequeño detalle, pero ayuda muchísimo a mantener la lavadora fresca.
Otros consejos para evitar futuros olores
Además de los trucos que te he contado, hay algunas cosas que he aprendido y que aplico siempre:
- No uses demasiado detergente. Creía que cuanto más echaba, mejor lavaba, pero es justo al revés. El exceso se queda acumulado y huele fatal.
- Haz un lavado con agua caliente al mes. Esto ayuda a eliminar bacterias y residuos que se quedan en los conductos.
- Usa vinagre como suavizante de vez en cuando. Es natural, elimina malos olores y no deja rastro en la ropa.
- Limpia la lavadora regularmente. No esperes a que huela mal para actuar. Una limpieza mensual es suficiente para evitar problemas.
Espero que estos consejos te sirvan tanto como a mí. Y si tienes algún otro truco que te funcione, ¡compártelo! Siempre es bueno aprender cosas nuevas. 😊